Según el filtrador Moore's Law is Dead, el próximo dispositivo funcionará tanto como consola portátil como consola doméstica, permitiendo a los jugadores conectarla para jugar en el televisor y también para jugar en cualquier lugar.

Se ha afirmado que el sistema podría costar alrededor de 400 dólares y podría ser más potente que la ASUS ROG Ally X de Microsoft, una PC portátil para juegos.

Los rumores sugieren que Sony está posicionando el supuesto dispositivo como un complemento completo para la PS6, en lugar de un dispositivo exclusivo para streaming como la PlayStation Portal.

A diferencia de la Portal, que requiere una conexión constante a una PS5, esta nueva consola portátil está diseñada para ejecutar juegos de forma nativa, incluyendo posiblemente títulos de la próxima generación de PS6.

Sony no ha confirmado el dispositivo, pero se especula que la compañía se prepara para competir con Nintendo en el mercado de las consolas híbridas, ofreciendo una consola más potente.

También se informó que el sistema podría usar hardware AMD personalizado, aunque los detalles son escasos.

Fuentes sugieren que Sony aún está experimentando con prototipos, y que el diseño final y las especificaciones podrían cambiar antes del lanzamiento.

El momento de las filtraciones coincide con el escrutinio de Sony sobre su estrategia de servicio en vivo, tras recientes reveses, como el fracaso de Concord.

Una consola portátil exitosa podría ampliar su oferta de hardware y consolidarse en el mercado de los videojuegos portátiles.

Por ahora, el proyecto sigue sin confirmarse. Pero si Sony realmente está desarrollando una PlayStation 6 portátil al estilo de Nintendo Switch, marcaría el gran regreso de la compañía al mercado de las consolas portátiles desde la PlayStation Vita en 2011.