El golfista estaba considerando convertirse en el primer capitán en el torneo desde Arnold Palmer en 1963, pero finalmente se ha quedado fuera, ya que está concentrado en recuperar la Ryder Cup para su país en Bethpage Black el próximo mes.

Bradley declaró a la prensa: "Esta fue una decisión realmente difícil. Diría que hubo un momento este año en el que yo estaba jugando, hace un tiempo, y todos estos chicos dieron un paso al frente de forma importante y se ganaron un lugar en este equipo”.

"Es algo de lo que estoy muy orgulloso y algo que realmente deseaba. Fue una decisión extremadamente difícil, pero estoy muy contento. Estoy muy contento con estos seis jugadores y me alegra que haya terminado. Crecí queriendo jugar la Ryder Cup. Crecí queriendo luchar junto a estos chicos. Me rompió el corazón no jugar. De verdad. Uno trabaja una eternidad para entrar en estos equipos, pero al final me eligieron para hacer un trabajo".

El ex ganador del Campeonato de la PGA ha elegido a Justin Thomas, Collin Morikawa, Ben Griffin, Cameron Young, Patrick Cantlay y Sam Burns como sus capitanes y cree que lo mejor para el equipo será que no tenga que compaginar las responsabilidades de jugar y ser capitán: "Me eligieron para ser el capitán de este equipo. Mi objetivo final al empezar esto era ser el mejor capitán posible. Así es como sentía que podía hacerlo. Si llegábamos a este punto y sentía que el equipo era mejor conmigo, lo haría. Iba a hacer lo que creyera mejor para este equipo. Estoy 100% seguro de que esta es la decisión correcta. Estos seis chicos, una vez más, jugaron de forma increíble en la recta final y me facilitaron mucho la decisión”.