Según Bloomberg, los primeros usuarios de Apple han expresado su preocupación porque la nueva Siri en iOS 26.4 aún esté por detrás de rivales de IA como ChatGPT de OpenAI y Gemini de Google, a pesar de ser presentada como la pieza clave del reinicio de la inteligencia artificial de Apple.
Se espera que la rediseñada Siri ofrezca conversaciones más naturales, mejor comprensión del contexto y una integración más profunda con las apps, pero fuentes internas afirman que el progreso ha sido desigual.
Varias figuras clave de la división de IA y aprendizaje automático de Apple, incluyendo miembros del equipo de Modelos de la Fundación Apple, han dejado sus puestos en los últimos meses en medio de lo que una fuente describió como 'confusión y baja moral'.
Según informes, la división de Inteligencia de Apple, dirigida por John Giannandrea, se ha enfrentado a crecientes desafíos tras un año turbulento marcado por retrasos en los proyectos y cambios de liderazgo.
Giannandrea, quien se unió a Apple en 2018 procedente de Google para liderar sus iniciativas de IA, supuestamente vio reducidas sus responsabilidades, y el jefe de software, Craig Federighi, y el arquitecto de Vision Pro, Mike Rockwell, ahora están dando forma a gran parte de la estrategia de IA de Apple.
Esta inquietud surge tras la supuesta decisión de Apple de considerar integraciones de IA de terceros para reforzar las capacidades de Siri, una medida sin precedentes para una compañía conocida por mantener su ecosistema de software estrictamente cerrado.
La próxima versión de iOS 26.4, cuyo lanzamiento está previsto para la primavera del próximo año, probablemente incluirá la primera versión pública de la nueva Siri, que según se informa, presentó dificultades en las pruebas internas con respecto a la precisión y la capacidad de respuesta.
Si bien las fuertes ventas del iPhone 17 protegieron a Apple de consecuencias inmediatas, los analistas de la industria advierten que la IA pronto podría convertirse en un factor decisivo en la elección del consumidor.