Un código recién descubierto dentro de una versión beta de la aplicación ChatGPT para Android apunta a compatibilidad integrada con anuncios y funciones de compra, una señal inequívoca de que la compañía está explorando nuevas fuentes de ingresos.

El descubrimiento provino del ingeniero informático Tibor Blaho, quien detectó referencias a una 'función publicitaria', incluyendo términos como 'contenido de bazar', 'anuncio de búsqueda' y 'carrusel de anuncios de búsqueda'.

Si bien OpenAI no ha confirmado públicamente el cambio, el código sugiere que se están realizando pruebas internas.

Se trata de un cambio notable para el CEO Sam Altman, quien una vez describió los anuncios en ChatGPT como un 'último recurso'.

Su tono se ha suavizado recientemente; en el podcast de la compañía a inicios de este año, Altman afirmó no oponerse por completo a los anuncios, señalando a Instagram como un ejemplo de publicidad bien hecha.

El momento no es casual. A pesar de prever 13 mil millones de dólares en ventas para 2025, OpenAl sigue lejos de ser rentable.

La inversión masiva en chips, centros de datos e infraestructura en la nube -gran parte vinculada a acuerdos con Microsoft y Amazon, que según se informa ascienden a casi 300 mil millones de dólares- sigue superando los ingresos.

Los analistas de HSBC predicen que OpenAI podría seguir sin ser rentable para 2030, incluso con un aumento en los suscriptores premium a ChatGPT.

La introducción de anuncios podría ayudar a cubrir esa necesidad, y con el enorme volumen de datos conversacionales generados por los usuarios de ChatGPT, estos anuncios podrían volverse extremadamente específicos y lucrativos.