El fabricante de automóviles, propiedad de Tata Motors, informó que el ataque comenzó este lunes 1 de septiembre y coincidió con la publicación de las nuevas matrículas de vehículos en el Reino Unido, tradicionalmente uno de los periodos de mayor actividad del año para las ventas y entregas de la empresa.
Se informó por correo electrónico a los trabajadores de producción de la planta de Halewood, en Merseyside, que no se presentaran a trabajar este martes 2 de septiembre, mientras que otros que ya se encontraban en la planta fueron enviados a casa.
En un comunicado publicado el lunes y reportado por la BBC, Jaguar Land Rover declaró:
'JLR se ha visto afectado por un ciberincidente. Tomamos medidas inmediatas para mitigar su impacto, apagando proactivamente nuestros sistemas. Ahora estamos trabajando a buen ritmo para reiniciar nuestras aplicaciones globales de forma controlada. En este momento, no hay evidencia de robo de datos de clientes, pero nuestras actividades de venta minorista y producción se han visto gravemente interrumpidas'.
La compañía confirmó que actuó mientras el ataque aún estaba en curso, desconectando los sistemas para intentar contener los daños.
Aún no se ha establecido la identidad de los atacantes.
Fuentes indicaron que el incidente guardaba similitudes con recientes ataques informáticos a minoristas del Reino Unido, como Co-op y Marks Spencer, en lo que los hackers buscaban extorsionar.
Tata Motors, la empresa matriz india de Jaguar Land Rover, no ha proporcionado más detalles sobre la interrupción, pero expertos del sector señalaron que el momento del incidente podría tener un impacto financiero significativo.
Septiembre es uno de los meses pico para las ventas de automóviles en el Reino Unido, y el cambio de matrícula suele impulsar la demanda de vehículos nuevos.
El cierre representa un nuevo revés para Jaguar Land Rover, después de que la firma informara recientemente de una caída en sus ganancias, atribuyéndole al aumento de costos vinculado a los aranceles impuestos por Estados Unidos.
La compañía ha estado intentando estabilizar su posición financiera ante las presiones de la cadena de suministro global, la inversión en tecnología de vehículos eléctricos y las cambiantes condiciones del mercado.
Se indicó a los trabajadores de la red de producción de Jaguar Land Rover que esperen nuevas instrucciones, mientras la empresa restaura su infraestructura de TI e intenta reanudar sus operaciones.