Según Bloomberg, la Casa Blanca revelará detalles de una nueva iniciativa de manufactura que busca traer una mayor parte de la cadena de suministro de Apple de vuelta a Estados Unidos.
Según se informa, el programa incluye planes para producir más componentes críticos a nivel nacional, lo que refuerza los objetivos económicos y de seguridad nacional.
El portavoz de la Casa Blanca, Taylor Rogers, declaró:
'La agenda económica -América Primero- del presidente Trump ha asegurado billones de dólares en inversiones que apoyan el empleo y el desarrollo de las empresas estadounidenses. El anuncio de hoy con Apple representa otra victoria para nuestra industria manufacturera'.
La medida sigue las advertencias previas de Trump, quien amenazó con imponer aranceles de al menos el 25 por ciento a los productos de Apple fabricados en el extranjero, incluyendo su producto estrella, el iPhone.
La mayor parte de la producción actual de Apple se concentra en China e India, lo que llevó al director ejecutivo Tim Cook a presionar para obtener exenciones arancelarias.
Apple aún no ha hecho comentarios públicos, pero la última inversión eleva su compromiso total con Estados Unidos a 600 mil millones de dólares durante los próximos cuatro años.
Esto incluye proyectos previamente anunciados, como una nueva planta de fabricación de servidores en Houston y una academia de proveedores en Michigan.
El anuncio se produce mientras Trump se prepara para implementar aranceles amplios sobre productos que contienen chips semiconductores la próxima semana, y con aranceles específicos para cada país que entrarán en vigor desde este jueves 7 de agosto.
Los analistas afirman que esta medida podría ayudar a Apple a evitar un aumento de costos que, de lo contrario, afectaría los márgenes de beneficio y los precios al consumidor.
Una exención exitosa también podría dar a Apple una ventaja competitiva sobre rivales extranjeros como Samsung.