Creo que cuanta más información pueda obtener de entrenadores exitosos, especialmente en selecciones nacionales y en cualquier deporte, sobre cómo reunir a atletas realmente talentosos acostumbrados a jugar solos, más valioso será”.
Keegan dedicó un tiempo a deliberar sobre si participar en el torneo antes de descartarse del equipo, pero admitió que, de todas formas, siempre había querido centrarse en su capitanía: “Para ser honesto, nunca planeé jugar. Realmente quería ser solo el capitán. Lo tenía muy claro. Quiero servir a los chicos. Me pidieron que hiciera un trabajo y quiero hacerlo lo mejor posible. Cuando me llamaron y me dijeron que me nombrarían capitán de la Ryder Cup, lo primero que dijeron fue: ‘Queremos que seas el primer capitán jugador desde Arnold Palmer en 1962’. Y la verdad es que me daba vueltas la cabeza. No sabía de qué estaban hablando, pero sabían que era una posibilidad y que tendríamos todo listo para ello”.