El club anunció esta semana que despedirán a 200 empleados más mientras continúan con las medidas de ahorro de costes en un intento de controlar las finanzas después de cinco años de pérdidas.

Amorim dijo a los periodistas esta semana: "Es fácil para mí estar aquí y decir todas las cosas bonitas, pero tenemos que mejorar. "El fichaje es crucial y tenemos que mejorar el equipo.

"Necesitamos rendir mejor, tenemos que estar en Europa y no en nuestra posición durante la temporada".

El técnico de 40 años señaló que el personal que pierde sus puestos de trabajo está "pagando el precio" de sus malos resultados en el campo: "Ellos [los empleados] están pagando el precio de nuestra falta de éxito y no puedo decir nada ahora que vaya a convencer a los aficionados y a todo el personal de que lo vamos a lograr. Tenemos una idea. Para mí, como entrenador, tenemos que ser un mejor equipo y fichar mejor y no cometer muchos errores en ese aspecto".

En la rueda de prensa del martes Amorim reconoció que el último año ha sido "muy duro" para todos los implicados en el club.

También señaló que "es bastante difícil ganar partidos de fútbol" incluso sin la cantidad de presión externa y distracciones. Sin embargo, insistió en que el encuentro de esta noche contra el Ipswitch Town es "un partido nuevo" y una oportunidad de mejorar su rendimiento en casa.

Dijo: "Desde que llegué, espero ganar todos los partidos en casa. No siento la presión porque no la siento, los aficionados son increíbles. Cada vez que vas a Old Trafford sientes el apoyo hasta el final. No siento la presión y tenemos que pararnos y pensar en el último partido. Es un partido nuevo y puede ser una nueva historia".