El gigante tecnológico surcoreano anunció que la instalación desplegará más de 50 mil GPU de Nvidia para potenciar el análisis, la simulación y la optimización en tiempo real en toda su red global de producción de chips.
El objetivo es convertir la IA en un componente esencial de todo, desde el diseño de chips y la gestión de procesos hasta el control de calidad y la robótica.
La fábrica utilizará la infraestructura de computación acelerada de Nvidia para crear lo que Samsung describe como un sistema de fabricación 'auto optimizado'.
La tecnología de gemelo digital basada en Nvidia Omniverse permitirá a Samsung simular las operaciones de fabricación, detectar anomalías y realizar mantenimiento predictivo antes de realizar cambios físicos en sus líneas de producción. Se prevé que el sistema se implemente en instalaciones de todo el mundo, incluyendo la planta de Samsung en Taylor, Texas.
En cuanto al diseño, Samsung colabora con Nvidia y socios líderes en automatización del diseño electrónico (EDA) para desarrollar herramientas de diseño aceleradas por GPU, capaces de gestionar arquitecturas de chips de última generación.
En fabricación, se reportó un aumento de 20 veces en el rendimiento de la litografía computacional gracias a las bibliotecas cuLitho y CUDA-X de Nvidia, lo que permite una predicción y corrección de patrones más rápidos durante la producción de chips.
Los modelos de IA propios de Samsung, basados en el marco Megatron de Nvidia, ya impulsan más de 400 millones de dispositivos y ahora se están integrando directamente en los sistemas de fabricación.
En robótica, la compañía está implementando las plataformas RTX PRO 6000 Blackwell Server Edition y Jetson Thot de Nvidia para conectar simulaciones virtuales con la automatización del mundo real.
La megafábrica también es compatible con AI-RAN, una iniciativa de computación en el borde de la red que acerca la inferencia de IA a dispositivos como drones y robots industriales, desarrollada conjuntamente por Samsung, Nvidia y empresas de telecomunicaciones surcoreanas.
Esta colaboración amplía una relación de 25 años entre Samsung y Nvidia que comenzó con la memoria DRAM para tarjetas gráficas y que ahora abarca la memoria HBM4 de vanguardia y la infraestructura acelerada por GPU, consolidando su alianza a la vanguardia de la carrera de semiconductores para IA.
