El técnico de 50 años ha aceptado el puesto inicialmente a corto plazo para apoyar la precaria clasificación de Suecia para el Mundial de 2026.
En un comunicado emitido por la Federación Sueca de Fútbol, Potter declaró: "Me siento muy honrado por el nombramiento, pero también increíblemente inspirado.
Suecia cuenta con jugadores fantásticos que rinden en las mejores ligas del mundo durante las semanas. Mi trabajo será crear las condiciones para que, como equipo, rindamos al máximo nivel para llevar a Suecia al Mundial el próximo verano".
Esto ocurre apenas un mes después del despido de Potter del West Ham, tras una racha de malos resultados para el club londinense.
Bajo su dirección, los Hammers perdieron cinco de sus primeros seis partidos de la temporada, lo que llevó al equipo a la zona de descenso.
Mientras tanto, Suecia despidió a su anterior seleccionador, Jon Dahl Tomasson, tras perder 1-0 contra Kosovo el 13 de octubre, lo que imposibilitó la clasificación automática para el Mundial del próximo año.
Como resultado de su derrota, Suecia se encuentra en la parte baja del Grupo B, tras empatar con Eslovenia, perder dos veces contra Kosovo y una vez contra Suiza.
Potter, quien dirigió al equipo sueco Ostersunds de 2011 a 2018, se mostró dispuesto a dirigir a Suecia, aunque no sentía la necesidad de asumir el cargo, ya que se encuentra en una "muy buena situación financiera".
En declaraciones al medio sueco Fotbolskanalen, afirmó: "Estoy abierto a cualquier cosa en la que sienta que puedo ayudar. El trabajo como entrenador de la selección sueca es fantástico. Siento algo por Suecia. Amo el país y me encanta el futbol sueco. Tengo mucho que agradecer al fútbol sueco”.
Continuó: "Estoy en una muy buena situación económica. He llegado al punto en que ya no tengo que considerar las finanzas como una razón para aceptar un trabajo o no".
Durante su etapa en el Östersunds, Potter llevó al equipo de la cuarta a la primera división y a los dieciseisavos de final de la Europa League.