La defensa de 33 años insistió en que sigue rindiendo al máximo nivel futbolístico, pero es consciente de que su rendimiento ha alcanzado su máximo, por lo que intenta ser menos competitiva y simplemente disfrutar de sus logros.

En el nuevo número de la revista Women’s Health, declaró: “Soy honesta conmigo misma. Sigo al máximo nivel, pero no soy tan buena como hace seis años. Fui la mejor jugadora del mundo en un momento dado y no puedo alcanzar ese nivel. Estoy intentando aprender a dejar de ser la 'Lucy competitiva' y sentirme un poco más orgullosa de mis logros”. Cuando Inglaterra perdió la final del Mundial contra España hace dos años, a Lucy le preguntaron inmediatamente si planeaba retirarse, un tipo de preguntas que no cree que se habría enfrentado si fuera hombre: "Creo que eso es algo que a las mujeres se les señala: la edad, la apariencia, el reloj biológico. No creo que sea igual para los hombres. Pero me gusta la idea de: 'Bueno, les demostraré que se equivocan'".

Aunque Lucy aún no está lista para retirarse, está considerando sus opciones profesionales para cuando lo haga, y también tiene la esperanza de formar una familia en el futuro: "Podría conseguir un trabajo corporativo. Podría intentar formar parte de la Federación o de la FIFA. Podría ayudar a alguien como el Chelsea a desarrollar el equipo femenino. No diría que hay algo que me muera por hacer, aparte de formar una familia. Mi hermano tiene dos hijos y eso es lo que más envidio, ver a mis sobrinos. Pero hay mucho tiempo para eso, y no sé cómo será”.