El mediapunta belga jugó con el City en el Etihad Stadium por última vez durante la victoria por 3-1 sobre el Bournemouth el martes (20/05/2025), lo que les dio un gran impulso en la carrera por la Champions League y admite que será extraño dejar un club en el que ha pasado los últimos 10 años. De Bruyne dijo en su discurso posterior al partido: "Se siente un poco raro. Ha sido una experiencia increíble.

"Quiero alegrar a la gente, jugar un fútbol ofensivo, creativo; eso es lo que soy en el campo y quiero divertirme. Fue una alegría trabajar muy duro y crear algo para este club. Estoy súper orgulloso".

"Todos me han impulsado muchísimo, dentro y fuera del club, para ser la mejor versión de mí mismo, y estos chicos que tengo delante me han hecho mejor que antes. Es un honor jugar con estos chicos. He hecho muchos amigos para toda la vida”, agregó.

De Bruyne desaprovechó una oportunidad clarísima de celebrar su despedida en el Etihad con un gol y bromeó diciendo que su hijo no lo dejaría olvidar el momento: "Es terrible. No hay excusas. Mi hijo va a ser muy duro conmigo hoy. La afición del City recibió a De Bruyne con entusiasmo al final del partido y el entrenador Pep Guardiola afirmó que fue un momento especial”.

"Todos vieron cuánto le tiene la gente del Manchester City a él y a su familia, y cuánto cariño le tienen. Los títulos son bonitos y todo lo que ha logrado, pero cuando uno se va después de 10 años con tanto respeto y gratitud, no hay nada mejor que eso. Soy parte de eso, el club tomará la decisión, pero es un día triste y lo echaremos de menos, de eso no hay duda”, finalizó.