El torneo se celebrará en Suiza el mes que viene, y las jugadoras se solidarizan con la carga que supone para la afición que quiere asistir, ya que estarán ayudando a sus seres queridos con el alto coste de la vida en el país.

Georgia Stanway declaró al periódico The Times: “Mi familia puede (viajar)... Pero también soy consciente de que Suiza es un país muy caro. Incluso para vuelos y hoteles, el costo de la vida es altísimo, así que entendemos la demanda de los aficionados”.

Y creo que eso también es difícil para nosotros, porque queremos ayudar y apoyar al máximo, incluso con nuestras propias familias. Muchos estamos haciendo un gran esfuerzo para asegurarnos de que nuestras familias puedan viajar. Nos encantaría ver a tantos aficionados como sea posible y queremos agradecerles de antemano porque sabemos que no es barato”, abundó.

Ella Toone coincidió en que también ayudará a su familia con los gastos de su estancia en Suiza: “He oído que es bastante caro. Es uno de los países más caros del mundo. Creo que será un poco difícil para las familias que se queden fuera durante todo el torneo, pero sé que siempre ayudaré a mi familia a estar allí, a crear recuerdos y a asegurarme de que coman”.

Se entiende que la FA está otorgando a los 23 miembros de la plantilla el mismo apoyo financiero para viajes y alojamiento familiar. La cantidad es igual a la ofrecida durante el Mundial Femenino de 2023 en Australia y a la que reciben los jugadores de la selección masculina de Inglaterra.

La UEFA ha implementado medidas para ayudar a los aficionados, incluyendo transporte público gratuito para quienes tengan entradas para los partidos y orientación sobre alojamiento asequible.