El delantero de 30 años puede ser el capitán de la selección nacional y su máximo goleador de todos los tiempos, pero no da por sentado sus apariciones y representar a su país es tan importante para él ahora como cuando debutó. como suplente en un partido de clasificación de 2015 contra Lituania.

Hablando de los partidos que cambiaron su vida, dijo a la revista FourFourTwo: “Jugar para Inglaterra significa mucho para mí, así que tengo que elegir mi debut. Fue un momento mágico hacerlo en Wembley: marcar en ese estadio, frente a mis amigos y mi familia, era todo lo que había soñado cuando era niño…”.

“Marcar mi debut en el escenario internacional con un gol a los dos minutos de haber entrado fue muy especial. Jugar para Inglaterra siempre me genera esa sensación, sin importar cuántas veces me elijan. Nunca pierdes ese orgullo”, abundó.

Y Harry no cree que ningún partido tenga más “presión” que jugar la Copa del Mundo.

Destacando la victoria de Inglaterra por 2-1 sobre Túnez en el torneo de 2018, dijo: “Esa fue mi primera Copa del Mundo, la competición más importante del mundo y la mayor presión que se puede sentir en el futbol. Salir en mi primer partido en ese escenario y marcar dos goles, incluido el gol de la victoria en el último minuto, me colocó en una plataforma más grande e hizo que la gente de todo el mundo se diera cuenta”.

“Tuvimos un torneo decente, llegamos a semifinales y ese momento de marcar un gol en el último minuto en una Copa del Mundo, un torneo que he estado viendo toda mi vida, fue simplemente increíble. Marcar goles para Inglaterra es algo que permanecerá contigo para siempre, especialmente en los grandes torneos y partidos importantes".